49.-EL REINO MILENIAL


49. El Reino Milenial
por Lewis Sperry Chafer

A. El Concepto Del Reino De Dios

En las Escrituras, la expresión «reino de Dios» en general se refiere a la esfera del gobierno de Dios en el universo. Puesto que Dios ha sido siempre soberano y omnipotente, hay un sentido en que el reino  de  Dios es eterno. Nabucodonosor, rey de Babilonia que fuera humillado por Dios, dio testimonio de esto cuando dijo: «Bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades. Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?» (Dn. 4:34-
35).

Sin embargo, el gobierno universal de Dios fue desafiado en la eternidad pasada por Satanás y los seres  angélicos que se unieron a él en su rebelión contra Dios. Aunque Dios demostró su soberanía  juzgando  a los rebeldes, la entrada del pecado en el mundo introdujo el programa divino para demostrar la soberanía de Dios en la historia humana. Esto comprende el concepto de un reino teocrático, esto es, un reino en que Dios es el gobernador supremo, aun cuando obra por medio de sus criaturas. Cuando Adán fue creado, se le dio dominio sobre toda la tierra (Gn.
1:26, 28). Sin embargo, en desobediencia a Dios, Adán y Eva comieron del fruto prohibido. En su caída  en pecado Adán perdió el derecho de gobierno, y de allí en adelante la soberanía de Dios que había sido entregada al hombre fue delegada en ciertas personas escogidas a quienes Dios entregó el  gobierno. Consecuentemente, se ha permitido que algunos hombres reinen a través de la historia. Por ejemplo, Daniel le recordó esto a Belsasar al referirse al hecho de que Dios había castigado a Nabucodonosor «hasta que reconoció que el Altísimo Dios tiene dominio sobre el reino de los hombres, y que pone sobre él al que le place» (Dn. 5:21).

En el Antiguo Testamento, una demostración importante del gobierno teocrático fue el reino de Israel  bajo los reyes Saúl, David y Salomón. Los gobernadores gentiles también pudieron tener una esfera de gobierno político, en el propósito soberano de Dios. Este concepto general de gobierno bajo permisión y  dirección divina es mencionado en Romanos 13:1, donde Pablo escribe: «Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.»

En  adición  a  la  soberanía  de  Dios  manifestada  en  los  gobiernos  políticos  y  en  sus gobernadores, las Escrituras dan testimonio del gobierno espiritual, en el que Dios gobierna los corazones de los hombres. Esto ha sido a desde el comienzo de la raza humana, y el reino espiritual  incluye a todos los que se sujetan voluntariamente a Dios, sean hombres o ángeles. Pablo se refería a este concepto espiritual de reino en Romanos 14:17 al decir: «Porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.»

En el Evangelio de Mateo se hace una distinción entre el uso de las expresiones «reino de Dios» y «reino de los cielos». Muchos intérpretes consideran estas expresiones como sinónimas, puesto que Mateo frecuentemente usa la expresión «reino de los cielos» en versículos similares a los que en otros evangelios  se usa «reino de Dios». Aunque las expresiones mismas son muy similares, el uso parece indicar que «reino de los cielos» es una expresión más amplia que «reino de Dios», e incluye la esfera de la profesión de fe, como en la parábola del trigo y la cizaña, donde el reino de los cielos aparentemente incluye la cizaña, y en la parábola de la red, donde el reino de los cielos parece incluir peces buenos y malos (cf. Mt. 13:24-30, 36-43, 47-50).

Por otra parte, el reino de Dios no se considera como una esfera de profesión, sino una esfera de verdadera situación espiritual, como se ilustra en Juan 3:5, donde Cristo dice a Nicodemo:
«De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el

reino de Dios.» Sin embargo, la mayoría de los expositores prefieren el punto de vista de que no hay una diferencia esencial entre los dos reinos.

No obstante, hay una distinción más importante que radica en el contraste entre el reino en la era  actual  y  el  reino  en  el  milenio.  El  reino  en  la  era  actual  es  un  misterio,  esto  es,  sus características principales son revelaciones que no fueron dadas en el Antiguo Testamento (cf. Mt. 13); pero el reino en su forma milenial secumplido después de la segunda venida de Cristo y no es un misterio.

Esto también comprende la distinción entre reino invisible —el gobierno de Dios en los corazones de los creyentes en la era presente— y el reino visible y glorioso de Dios que todos veremos en la tierra después de su segunda venida. Esta distinción es completamente importante y esencial para distinguir entre la era actual como esfera de gobierno divino y el que existirá en el reino milenial.

Existen tres interpretaciones importantes en relación al concepto de reino milenial. El punto de vista  premilenial interpreta las Escrituras diciendo que la segunda venida de Cristo será primero, y luego vendrá un reinado de Cristo de mil años sobre la tierra antes de que el estado eterno de un nuevo cielo y una nueva tierra sea establecido. Se llama premilenial, porque pone la venida de Cristo antes del reino milenial.

El segundo punto de vista es el amilenialismo, que niega que haya un reino milenial literal sobre la  tierra. Generalmente hablando, este punto de vista sostiene que Cristo vendrá en su segunda venida e inmediatamente dará paso a los nuevos cielos y a la nueva tierra sin que haya un reinado de mil os. Este punto de vista interpreta muchos- pasajes del Antiguo y el Nuevo Testamentos que se refieren al  reino milenial como predicciones que se están cumpliendo en forma no literal, ya sea en la experiencia actual de la iglesia sobre la tierra o la experiencia de la iglesia en el cielo.

Un tercer punto de vista es el postmilenialismo. Esta interpretación cree que en la edad actual se verá el triunfo del evangelio en el mundo y así se introducirá una edad de oro cuando hasta cierto punto se  cumplirán la justicia y la paz profetizadas para el reino milenial. Es llamado postmilenialismo porque considera que la segunda venida de Cristo se el clímax de la edad de oro, y pond fin al milenio. El postmilenialismo conservador representa un reinado supremo de Cristo   sobre   los   corazones   de   los   hombres   por   un   período   litera de   mil   años El postmilenialismo más liberal es similar a los  puntos de vista de la evolución y considera un avance gradual en el progreso del mundo que culmina en una edad dorada. Debido a todas las tendencias de la historia del siglo xx, ha habido poca base para creer que la causa de Dios será prosperada en el mundo por medios humanos, y la mayoría de los intérpretes de la actualidad son amilenialistas o premilenialistas.

Aunque se han presentado muchos argumentos en pro y en contra del concepto de un milenio literal, la solución está determinada por el punto hasta el cual las profecías de las Escrituras se interpretan  literalmente. En esta discusión se supondrá que la profecía debe ser interpretada literalmente   en   e mism sentido   que   cualquier   otro   tem de   la   revelación   divina. Consecuentemente, muchas  predicciones del Antiguo Testamento, a como el capítulo clásico de Apocalipsis 20 en el Nuevo Testamento, se interpretan literalmente como que quieren decir lo que dicen: que habrá un reinado literal de Cristo sobre la tierra después de su segunda venida y antes que sean creados los nuevos cielos y la nueva tierra. El libro de Walvoord The Millennial

Kingdom (El reino milenial) presenta argumentos detallados acerca de los diversos puntos de vista sobre el milenio, y es una discusión detallada de esta cuestión.

B. El Reino Milenial, Un Reinado De Dios Sobre La Tierra

En contraste con el punto de vista amilenial, que considera el reino de Dios primariamente como  un  reinado  espiritual  en  los  corazones  de  los  hombres,  muchos  pasajes  apoyan  la conclusión de que el reino es un reino literal sobre la tierra, en el cual Cristo será realmente el gobernador potico supremo y el líder espiritual y objeto de culto. Este concepto se presenta en forma amplia en el Antiguo Testamento y en el Nuevo.

En el Salmo 2, donde se anuncia la rebelión de la nación contra Dios, se le da la siguiente orden al Hijo de Dios: «Pideme, y te daré por herencia las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra» (y. 8). Este no es un gobierno espiritual, sino Un gobierno político real, como se ve en el  versículo siguiente: «Los quebrantarás con vara de hierro, como vasija de alfarero los desmenuzarás»  (y. 9). Evidentemente esto no puede referirse a la iglesia o a un reinado espiritual en el cielo, sino más bien representa a un monarca absoluto que abatirá a los inicuos y los pondrá bajo sujeción.

Otro pasaje importante que enfatiza el carácter terrenal del reino es Isaías 11, donde Jesús, como descendiente de David, es presentado como que trae un justo juicio sobre la tierra y castiga a los impíos. Isaías 11:4 afirma: «Juzga con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la espada de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.» En este pasaje se menciona frecuentemente la tierra (como en Is. 11:9), y se describen los tratos de Dios con las naciones a fin de recoger a Israel de entre todas las naciones.

Una cantidad casi innumerable de otros versículos afirman o implican que el reino será sobre la tierra (cf. Is. 42:4; Jer. 23:3-6; Dn. 2:35-45; Zac. 14:1-9). La descripción en estos pasajes del reinado de Cristo sobre la tierra en el reino milenial evidentemente no describe la edad presente ni describe el cielo. Cualquier cumplimiento razonable requeriría de un reinado literal sobre la tierra a continuación de la segunda venida de Cristo.

C. Cristo Como Rey De Reyes En El Milenio

Muchos pasajes del Antiguo y del Nuevo Testamentos combinan su testimonio de que Cristo será gobernador supremo sobre la tierra. Cristo, como hijo de David, se sentará sobre el trono de David (2 S.  7:16; Sal. 89:20-37; Is. 11; Jer. 33: 19-21). Cuando Cristo nació, vino como rey, según fuera anunciado por el ángel Gabriel a María (Lc. 1:32-33). Como Rey fue rechazado (Mr.
15:12, 13; Lc. 19:14). Cuando fue crucificado murió como Rey de los judíos (Mt. 27:37). En su segunda  venida es descrito como «REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES» (Ap. 19:16).
Literalmente centenares de versículos en el Antiguo Testamento declaran o implican, por lo
menos,  que  Cristo  reinará  sobre  la  tierra.  Algunos  de  los  textos  más  importantes  son especialmente claros (Is. 2:1-4; 9:6-7; 11:1-10; 16:5; 24:23; 32:1; 40:1-11; 42:1-4; 52:7-15; 55:4; Dn. 2:44; 7:27; Mi. 4:1-8; 5:2-5; Zac. 9:9; 14:16-17).

Una de las características del reino milenial es que David se resucitado y reinará como príncipe  bajo  el  mando  de  Cristo  (Jer.  30:9;  33:15-17;  Ez.  34:23-24;  37:24-25;  Os.  3:5). Ciertamente esta situación no se ve en la iglesia presente y exige que ocurran la venida de Cristo y la resurrección de los santos del Antiguo Testamento antes que pueda cumplir-se la profecía.

D. Características Principales Del Gobierno Del Milenio

Como lo dejan ver los pasajes que hablan acerca del reino futuro, hay por lo menos tres aspectos importantes en el gobierno de Cristo durante su reinado milenial.

1. Muchos pasajes testifican que el gobierno de Cristo será sobre toda la tierra, más allá de los límites  de  cualquier otro reino terrenal anterior y del reino de David mismo. Al establecer el gobierno mundial, Dios cumplió su propósito de que el hombre debía gobernar sobre la tierra. Aunque Adán fue descalificado, Cristo, como el segundo Adán, puede cumplir esta meta como se menciona en Salmo  2:6-9. Según Daniel 7:14, al Hijo del Hombre «le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos  los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio  es dominio eterno, que nunca pasará y su reino uno que no será destruido». El mismo pensamiento se menciona en Daniel 2:44; 4:34; 7:27. La universalidad del gobierno de Cristo sobre la tierra también se menciona en Salmo 72:8; Miqueas 4:1-2; Zacarías 9:10.

2. El gobierno de Cristo será de autoridad y poder absolutos. Cristo regirá «con vara de hierro» (Sal. 2:9; Ap. 19:15).

Todos los que se oponen serán castigados con la destrucción (Sal. 2:9; 72:9-11; Is. 11:4). Un gobierno tan absoluto no es la característica del gobierno de Cristo sobre su iglesia o sobre el mundo en la actual dispensación y sólo podría cumplirse si Cristo tiene un reinado literal sobre la tierra después de su segunda venida.

3. El gobierno de Cristo en el milenio será de justicia y paz. Esto se desprende de pasajes clásicos como Isaías 11 y Salmo 72.

Estas  características  poco  usuales  del  reino  sólo  son  posibles  gracias  a  los  juicios introductorios de Israel y los gentiles (discutidos en el capítulo anterior) y por el hecho de que Satanás es encadenado y ha sido dejado fuera de acción. La única fuente de mal en el mundo será  la  naturaleza  pecaminosa  de  los  hombres  que  están  todavía  en  su  carne  humana.  La separación del  trigo de la cizaña (Mt. 13: 24-30) y la separación de los peces buenos de los malos  (Mt.  13:  47-50)  son  preparativos  necesarios  para  el  reinado  de  Cristo.  El  milenio comenzará con todos los adultos convertidos como verdaderos creyentes en Cristo. Los hijos que nazcan durante el milenio serán sujetos  al  reinado justo de Cristo y serán castigados hasta el punto de la muerte física si se rebelan contra su Rey (Is. 65:17-20; Zac. 14:16-19). El pecado abierto será castigado y nadie podrá rebelarse contra el Rey en el reino milenial.

E. El Lugar Especial De Israel En El Reino Milenial

Durante el período del reino milenial Israel goza de un lugar de privilegio y de bendición especial. En contraste con la edad actual de la iglesia, en que judíos y gentiles están en un mismo plano y  tienen los mismos privilegios, el pueblo de Israel en el milenio heredará la tierra prometida y será objeto del favor especial de Dios. Será el tiempo de la reunión de Israel, su restablecimiento como nación y la renovación del reino davídico. Al fin Israel poseerá la tierra permanentemente y en forma completa.

Muchos pasajes tratan de este asunto. En el milenio los israelitas serán reunidos y restaurados a su antigua tierra (Jer. 30:3; 31:8-9; Ez. 39:25-29; Am. 9:11-15). Habiendo sido conducidos de regreso a su tierra, Israel estará formado por los súbditos del reino davídico revivido (Is. 9:6-7;
33:17, 22; 44:6; Jer. 23:5; Dn. 4:3; 7:14, 22, 27; Mi. 4:2-3, 7). Los reinos divididos de Israel y

Judá volverán a unirse nuevamente (Jer. 3:18; 33:14; Ez. 20:40; 37:15-22; 39:25; Os. 1:11). Israel,  como  la  esposa  de  Jehová  (Is.  54;  62:2-5;  Os.  2:14-23),  estará  en  una  posición  de privilegio sobre los creyentes gentiles (Is. 14:1-2; 49:22, 23; 60:14-17; 61:6-7). Muchos pasajes también hablan del  hecho  de que Israel revivirá espiritualmente (Is. 2:3; 44:22-24; 45:17; Jer.
23:3-6; 50:20; Ez. 36:25-26; Zac. 13:9; Mal. 3:2-3). Muchos otros pasajes dan información adicional acerca del estado bienaventurado de Israel, su avivamiento espiritual y su goce de la comunión con su Dios.

Aunque los gentiles no tendrán título en la tierra prometida, también tendrán bendiciones abundantes, como se puede deducir de varios pasajes del Antiguo Testamento (Is. 2:2-4; 19:24-
25; 49:6, 22; 60:1-3; 62:2; 66:18-19; Jer. 3:17; 16:19). La gloria del reino para Israel y para los gentiles sobrepasará en mucho cualquier cosa que el mundo haya experimentado antes.

F. Bendiciones Espirituales En El Milenio

Aunque el milenio se describe correctamente como el gobierno político de Cristo sobre la tierra, las características del reino proveerán un contexto para una vida espiritual abundante en tal grado que  ninguna dispensación anterior había podido lograrlo. Por cierto, esto se debe al hecho  de  que  Satanás  está  encadenado,  el  pecado  es  juzgado  de  inmediato  y  se  logra  el conocimiento universal del Señor. Según Isaías 11:9: «La tierra será llena del conocimiento de Jehová como las aguas cubren el mar.»

Se dan muchas promesas  de bendiciones espirituales  interiores que provienen del nuevo pacto. Jeremías 31:33, 34 declara: «Este es el pacto que ha con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. Y no enseña más ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová; porque  todos  me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acorda más de su pecado.» Será un período de justicia (Sal.  72:7; Is. 2:4). Las condiciones espirituales también harán posible un gozo y una bendición no acostumbrados para el pueblo de Dios (Is. 12:3, 4; 61:3, 7).

Aunque no hay evidencias de que el Espíritu de Dios vaya a bautizar creyentes en una nueva unidad  espiritual como ocurre en la iglesia actual, habrá, sin embargo, el poder y presencia interior en los creyentes durante el milenio (Is. 32:15; 44:3; Ez. 39:29; Ji. 2:28-29). Debido a la situación especial,  indudablemente hab una mayor bendición espiritual en todo el mundo durante el milenio que en cualquier otra dispensación anterior.

Como un centro para la adoración, se describe un templo milenial en Ezequiel 40-46. En este templo se ofrecen sacrificios que difieren algo de los sacrificios mosaicos. Los intérpretes han diferido en cuanto a si deben ser tomados literalmente o deben recibir otro tipo de explicación. No hay razones  sólidas para no aceptar el templo y el sistema sacrificial como una profecía literal.

Aunque la muerte de Cristo ha puesto fin a la ley mosaica y al sistema de sacrificios, los mencionados por Ezequiel parecen tener un carácter conmemorativo, mirando hacia atrás, hacia la cruz, así como los sacrificios del Antiguo Testamento miraban hacia adelante al sacrificio de la cruz.

En el milenio, con su extraordinaria bendición espiritual, lo terrible del pecado y la necesidad del sacrificio de Cristo serán más difíciles de comprender que en las dispensaciones anteriores.

En consecuencia, parece que el sistema de sacrificios se introduce como un recordatorio de la necesidad que hubo del sacrificio de Cristo, único que puede quitar el pecado. Si los sacrificios del Antiguo Testamento eran un anuncio adecuado de la muerte de Cristo, un medio similar podría emplearse en el milenio como un modo de conmemorarlo.

En  todo  caso,  hay  claras  evidencias  de  que  el  milenio  se un  tiempo  de  bendiciones espirituales mayores que lo acostumbrado, período en que la tierra estará caracterizada por la justicia, el gozo y la paz.

La  abundancia  de  las  bendiciones  espirituales  traerá  importantes  progresos  sociales  y económicos que superarán a todo lo conocido en dispensaciones previas. El hecho de que todos tendrán justicia y que los mansos serán protegidos asegurará la equidad en asuntos económicos y sociales. Probablemente la mayoría de las personas conocerán al Señor. La tierra misma se verá liberada de la maldición que hay sobre su productividad (Is. 35:1-2), y habrá lluvias abundantes (Is. 30:23; 35:7). En general, hab prosperidad, salud y bendiciones físicas y espirituales como nunca antes el mundo había conocido.

La situación milenial también incluirá importantes cambios en la tierra, algunos de ellos producidos  por  las  grandes  catástrofes  de  la  Gran Tribulación  y  otros  relacionados  con  la segunda venida de Cristo. Donde ahora está el Monte de los Olivos en Jerusalén, se extenderá un gran valle de este  a oeste (Zac. 14:4). Otro rasgo especial del período es que Jerusalén será exaltada por sobre el territorio que la rodea (Zac. 14:10). Como un todo, la tierra prometida será una vez más el jardín del mundo, el centro del reino de Dios en la tierra y el lugar de bendiciones especiales. En muchos respectos, el reino milenial será una edad de oro, el climax de la historia de la tierra y el cumplimiento del propósito de Dios de establecer a su Hijo como el supremo gobernador del universo.

Preguntas

1. En general, ¿cuál es el significado del reino de Dios?

2. ¿En qué sentido es el reino de Dios eterno y universal?

3. ¿En qué forma la entrada del pecado sirvió para introducir el concepto de reino teocrático?

4. ¿En qué sentido la caída de Adán dio como resultado el que Dios entregara a ciertos hombres el derecho de reinar?

5. ¿En qué sentido fue el reino de Israel una demostración especial del principio teocrático?

6. ¿En qué sentido es el reino de Dios en el corazón dif e— rente de su reino teocrático?

7. ¿Qué distinciones han hecho algunos entre las expresiones «reino de los cielos» y «reino de
Dios»?

8. ¿Qué distinciones importantes debieran hacerse entre la forma presente del reino y la forma futura del reino en el milenio?

9. ¿Qué se quiere decir por interpretación premilenial de las Escrituras?

10. ¿Qué se quiere decir por interpretación amilenial de las Escrituras?

11. ¿Qué se quiere decir por interpretación postmilenial de las Escrituras?

12. ¿Cuál es el principio de interpretación comprometido en estos diversos puntos de vista?

13. ¿Cuál es la contribución del Salmo 2 a la idea de un reino literal sobre la tierra?

14. ¿Qué se revela en Isaías 11 acerca del reino terrenal?

15. ¿Por qué es irrazonable hacer que la palabra «tierra» represente al cielo en estos pasajes?

16. ¿Q revela el Antiguo Testamento acerca de Cristo como el supremo gobernador sobre la tierra como Hijo de David?

17. ¿Qué pasaje apoya el concepto de que David será resucitado y goberna como príncipe bajo el  mandato de Cristo en el reino milenial, y por qué exige esto un reino futuro sobre la tierra?

18. Comprobar por las Escrituras que Cristo reinará sobre toda la tierra, sobrepasando en mucho los límites del reino davídico del Antiguo Testamento.

19. ¿Qué evidencia se puede presentar para demostrar que el gobierno de Cristo se de poder y autoridad absolutos?

20. ¿Q evidencia se encuentra en las Escrituras de que el reino sobre la tierra será de justicia y paz?

21. ¿En qué forma preparan el camino para un reinado justo los juicios sobre Israel, los gentiles y Satanás que se realizan al principio del milenio?

22. ¿Q lugar especial se da a Israel en el reino milenial, y cuáles serán las características de las bendiciones conferidas?

23. ¿Qué bendiciones especiales serán dadas a los gentiles en el reino milenial?

24. ¿Q evidencia hay de bendiciones  espirituales  poco usuales  para todos en el reino milenial?

25-. ¿Qué ministerio del Espíritu se hallará en el milenio?

26. ¿Qué se enseña acerca de un templo milenial y un sistema de sacrificios en el milenio?

27. En  vista  del  hecho  de  que  Cristo  murió  en  la  cruz,  ¿cómo  pueden  explicarse  esos sacrificios?

2& ¿Qué avances sociales y económicos de importancia se verán en el milenio?

29. ¿En qué sentido cambiará la productividad de la tierra en el milenio?

30. ¿Qué cambios topográficos de importancia ocurrirán en la tierra en el milenio?

31. Hacer un resumen de las bendiciones extraordinarias que caracterizarán el reino milenial.






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